Diagnóstico
El sistema energético chileno está atrapado en una paradoja: un Estado fragmentado frente a empresas concentradas.
Hoy el Ministerio de Energía formula políticas, pero no tiene un mando efectivo sobre las redes, las tarifas ni la gestión de crisis en el sistema eléctrico. El problema del sistema energético chileno es la fragmentación institucional que impide una conducción soberana, transparente y estratégica.
El Ministerio formula políticas, la Comisión Nacional de Energía (CNE) regula, la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) fiscaliza, el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN) opera y las empresas privadas concentran activos estratégicos sin coordinación efectiva del Estado.
Nuestra propuesta eléctrica para Chile
El candidato presidencial independiente Marco Enríquez-Ominami propone cambiar eso con una reforma profunda de gobernanza y soberanía energética, que combine eficiencia, transparencia y control público de los activos estratégicos.
Nueva arquitectura institucional
La solución es fortalecer la gobernanza, reordenando el sistema bajo un liderazgo estatal moderno, transparente y técnico, no personalista ni centralizado. Proponemos mantener al Ministerio de Energía como cabeza política y regulatoria, y sumarle una capa de mando soberano, técnico y de crisis, mediante una nueva arquitectura institucional con tres pilares:
- ANSE – Autoridad Nacional de Soberanía Energética: Órgano técnico presidencial que coordina los ministerios de Energía, Hacienda, Interior, Defensa y Ciencia para planificar, proteger y responder en crisis energéticas. No reemplaza a la CNE, SEC ni CEN: las coordina, asegurando mando unificado en situaciones críticas y visión de largo plazo.
- PESN – Perímetro Energético Estratégico Nacional: Marco legal que blinda infraestructuras críticas (subestaciones, data centers, transmisión) con participación estatal y certificación tecnológica soberana. Obliga a coparticipación estatal minoritaria y a certificación tecnológica soberana, reduciendo dependencia de software extranjero y vulnerabilidades cibernéticas.
- FNPE – Fondo Nacional de Participación Energética: Instrumento financiero que permitirá invertir en transmisión, almacenamiento y resiliencia, sin aumentar el déficit fiscal, mediante bonos soberanos de energía. Emitirá bonos SEIB (Sovereign Energy Infrastructure Bonds) respaldados por flujos energéticos. Permitirá co-inversión pública en transmisión, almacenamiento y proyectos de resiliencia, junto con BancoEstado y CORFO.
Modernizar el Estado
El Estado no debe ser un actor lento ni un mero regulador; debe ser un socio técnico, ágil y soberano. Así, Chile podrá equilibrar apertura al capital privado con control soberano sobre su seguridad energética.
Este modelo diferencia la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami:
- Del oficialismo, porque propone un Estado eficiente, no burocrático.
- De la derecha, porque defiende la soberanía energética sin populismo ni desregulación.
- Y de ambos, porque promueve una modernización productiva, apoyada en la ONIP, el BancoEstado como banco de desarrollo, y la manufactura verde.
Frente al alza de tarifas: Integridad tarifaria ya
Frente al alza irregular de tarifas eléctricas, la candidatura de Marco impulsa el plan “Integridad Tarifaria Ya”. ¿En qué consiste? Auditorías públicas, transparencia en precios, tarifas estabilizadas para PYMES y un bono eléctrico para los hogares más vulnerables.
El plan tendrá el siguiente cronograma:
- 0–90 días: “Integridad Tarifaria Ya”
Medidas ejecutivas sin cambiar la ley:
- Auditoría forense independiente sobre precios y traspasos a clientes.
- Portal de Trazabilidad Tarifaria, con datos públicos y actualizaciones mensuales.
- Mesa de Integridad Tarifaria (Energía–Hacienda–CNE–SEC–SERNAC DIPRES) con plazos y alertas tempranas.
- Bono Tarifa Eléctrica para el 40 % más vulnerable y Tarifa PYME Estabilizada (12 meses).
- SEC con nuevas facultades preventivas y cautelares.
- BancoEstado con línea de crédito de emergencia para PYMES afectadas por alzas.
- 3–6 meses: Correcciones regulatorias
Pequeño paquete legal, sin romper el mercado:
- Tope a la velocidad de traspaso de costos (cap trimestral).
- Cláusula de simetría tarifaria: cuando bajan los costos, las tarifas deben bajar al mismo ritmo.
- Sandbox tarifario para remunerar almacenamiento, demanda flexible y generación distribuida.
- Nuevas sanciones por opacidad o manipulación de información tarifaria.
- 6–12 meses: Soberanía y resiliencia
Reformas estructurales:
- Ley Marco de Soberanía Energética, creando ANSE, PESN y acciones doradas en activos críticos.
- FNPE para financiar reserva operativa nacional y co-inversión pública minoritaria en infraestructura clave.
- ONIP-Energía, con trazabilidad digital y plazos máximos por ley para obras de transmisión y almacenamiento.
Nuestro compromiso
- Estado profesional y ágil, que coordina y rinde cuentas
- Mercado con reglas claras, competencia efectiva
- Familias y PYMES protegidas, con tarifas justas y previsibles
- Seguridad y soberanía energética como política de Estado
El objetivo de este plan junto a todo nuestro programa de gobierno es un Estado profesional, ágil y soberano, capaz de equilibrar inversión privada con seguridad nacional.
Para lograrlo Marco Enríquez-Ominami propone una energía limpia y segura, con precios justos y control público.
Porque sin soberanía energética, no hay independencia económica.
0 comentarios